Terapia de Radiestesia

¿Qué es la Radiestesia?

Una de las técnicas de diagnóstico e investigación más impresionante, sobre todo por su alto nivel de asertividad, es la radiestesia. El hecho de que se valga de instrumentos como el péndulo y las varillas, la ha rodeado de una aureola de misterio y magia, llegándose a confundir hasta con técnicas de predicción. Sin embargo, lejos de la mirada mágico-religiosa que se le atribuye, la radiestesia tiene explicación a través del conocimiento del biolectromagnetismo.

La Radiestesia es la facultad que posee el ser humano para percibir radiaciones. Mediante técnicas y disciplinas aplicadas a través de los siglos, ha alcanzado tal grado de desarrollo, que permite realizar todo tipo de investigaciones, cualquiera que sea su naturaleza.

Nuestro organismo es un receptor que capta las radiaciones emitidas por otros cuerpos y por las diversas formas de energía tanto sensoriales como ultra-sensoriales o astrales.

En Radiestesia aplicada a la bioenergía, medimos los centros energéticos (chakras) y vemos como se encuentran (alineado, con fuga o bloqueo energético). Luego de obtener los datos armonizamos, limpiamos y alineamos el chakra que se encuentra en desequilibrio. Así mismo lo llevamos a nuestros cuerpos sutiles (físico, mental, emocional, espiritual, etérico), a nuestro habitad, espacio de trabajo…etc

El nombre de radiestesia está formado por la palabra latina radius, que significa radiación, y por el vocablo griego aisthesis que significa percepción (de los sentidos) en su acepción de ‘capacidad de sentir’. Se llamó radiestesista al practicante de la radiestesia.

Esta disciplina se conoce desde hace miles de años, lo cual queda demostrado por restos arqueológicos encontrados en:

Egipto: En el Valle de los Reyes se han encontrado varillas y péndulos.

China: Se hallaron grabados que muestran al Emperador Yu, de la Dinastía Hsia, que gobernó entre 2205 y 2197 A.C., manejando varillas de dos ramas.

Babilonia, Etruria, Imperio Romano y Europa medieval: existen documentos que evidencian el uso de la radiestesia para la búsqueda de oro, agua y en “adivinación”.

Entre los años 1700 y 1800, algunos médicos y sacerdotes hicieron investigaciones respecto al péndulo y las varillas de radiestesia.

Hasta 1890 compitieron el péndulo y las varillas como instrumentos para la detección de radiaciones, pero, a partir de ese año, como resultado de la experimentación con numerosos pacientes, el rector de la Universidad de Saltzburgo instituyó oficialmente el uso del péndulo como instrumento de diagnóstico médico; desde entonces se redujo el empleo de las varillas.

La radiestesia fue reconocida formalmente en Europa por los ejércitos beligerantes de la I Guerra Mundial para localizar minas. Después de la I Guerra Mundial se ha observado una tendencia al crecimiento acelerado del número de radiestesistas. En la II Guerra Mundial se ha utilizado la radiestesia para buscar submarinos...

En 1933 la Academia de Medicina de París organizó en Avignon un congreso al que se invitaron a todos los profesionales que venían investigando y trabajando con la rabdomancia, su finalidad era que cada cual aportara la información que permitiera entregar al mundo científico una herramienta certera para la aplicación de la rabdomancia. Con el reciente descubrimiento de las radiaciones, en aquel congreso se expuso que toda forma de vida (humana, animal, vegetal o mineral) así como cualquier cosa creada por el hombre, contiene vibraciones en correspondencia con una gama de colores, sonidos y un amplio espectro electromagnético, por lo que la vibración es una expresión de la vida en sus diferentes niveles y grados de densidad. Fue un asistente, el abate Alexis Bouly quien propuso ante los congresistas cambiar la denominación de rabdomancia por la de radiestesia, lo cual fue unánimemente aprobado. Este abate fundó la Sociedad de Amigos de la Radiestesia.

Sabemos que existen estos campos energéticos, ya que todos alguna vez los hemos percibido. Cuando visitamos un lugar y sentimos que está muy pesado o cargado el ambiente, y nos sentimos incómodos, sin podernos explicar, percibimos que algo está mal y deseamos salir, esto quiere decir que estamos captando la vibración de la energía en el lugar. Cuando conocemos a alguien, y simplemente hay afinidad o rechazo, sin conocer a la persona para nada, esto significa que estamos detectando el humor, la energía o el carácter de la otra persona.

Los objetos que utilizamos, si notamos que cada vez que usamos alguna cosa, no nos sentimos confortables, ya sea que el color no es el adecuado, o tal vez alguna vibración negativa quedo impregnada en la prenda de la última vez que la usamos. Si la prenda es nueva, tiene plasmada energía (ADN) de la persona que la confeccionó, la persona que la empacó, la persona que la transportó a la tienda, y de las otras personas que tocaron la prenda para probársela. Cuando alguien nos presta algo, podemos percibir de alguna manera la energía agradable o incómoda del objeto.

Lo anterior da una idea de que podemos aprovechar las herramientas de la Radiestesia, que nos permiten conocer la energía (ADN) que existe, así como restaurarla en los casos necesarios. Nosotros vibramos en muchas frecuencias, de la misma manera que todo lo que nos rodea. Aun cuando las situaciones en la vida son difíciles y existen carencias en el mundo, sí tratamos de enviar buenas vibraciones y pensamientos tanto a nosotros mismos como a los demás, podríamos contribuir a una atmósfera mejor, y como las leyes de la energía se reflejan cuánticamente, los beneficios serán percibidos por todo.

Beneficios de la Terapia de Radiestesia

• La terapia por medio de la Radiestesia ayuda a:
• Recuperar energía
• Mejorar los campos electromagnéticos
• Limpiar cargas negativas
• Despejar bloqueos
• Transmutar energía nociva en positiva
• Restablecer el equilibrio y balance en los niveles físico, emocional, mental y etérico.